VIVIR CON ESPERANZA
Cuando sientas que todo perdió su sentido,
cuando pienses que ya todo se acabó,
cuando la pena sea más grande que el olvido,
sólo tienes que escuchar al corazón.
Si para ti todos los días ya son iguales,
si no encuentras en tu vida una ilusión,
si piensas que no estás en tus cabales,
sólo tienes que escuchar a la razón.
Por muy fuerte que sea la tormenta,
por muy negro que venga el porvenir,
por más que el agua inunde la trastienda,
siempre existe una razón para vivir.
Recuerda que la esencia está en el alma,
que lo mejor del hombre es la bondad,
que la vida hay que vivirla desde el alba
para encontrar de frente la verdad.
Que el hombre sabio no se sienta a lamentarse,
se pone en marcha sin volver la vista atrás,
mira hacia el cielo, busca de nuevo la esperanza
y no permite a los problemas que le vuelvan a parar.
Piensa que en breve habrá un clavel en la ventana,
o un buen amigo con el que querrás charlar,
con Dios podrás siempre pensar en voz muy alta
porque Él entiende tu tristeza y tu pesar.
Cuando el sol luzca de nuevo en tu destino
y la felicidad se instale en tu interior,
sigue a esos rayos que te indican el camino
que hará que llegues a la senda del amor.
B.R.O.
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