Quieres saber adonde van los mejores chefs a comprar ????

¿Tienes dinerito escondido debajo de un ladrillo, pero quieres comer como un rey????  
A continuación te damos todos los datos para que puedas hacerlo, informándote también sobre todos los síntomas que puedes padecer al entrar en este establecimiento y contemplar tanta obra maestra junta......

Taberna Chic

Donde los mejores chefs acuden a suministrarse.

Gold Gourmet
c/Ortega y Gasset nº 85
Madrid

Gold Gourmet empezó como una frutería de barrio y ha acabado siendo un pequeño emporia con una máxima: lo mejor de donde sea.

Uno de los lugares comunes de la gastronomía es la pérdida de sabor de frutas y verduras. SÍ quieres una buena lubina salvaje o un chuletón de buey de tamaño pornográfico lo único que necesitas es una visa bien cargada para darte un homenaje, pero si lo que buscas es una verdura con sabor o una fruta en su mejor momento de consumo, la cosa está difícil, ni todo el oro del mundo son suficientes.

Pero no desesperes, como si de un cómic de Astérix se tratase, existe una pequeña tienda donde un señor de apellido Pacheco y de nombre Luis ofrece joyas inencontrables en otros establecimientos del ramo.

Setas de temporada, manzanas de altura, verduras de invierno... todo esto y mucho más es posible encontrarlo en Gold Gourmet, y la cosa no se queda ahí. Lo que comenzó como una pequeña frutería de barrio se ha convertido, en apenas una década, en un pequeño emporio gastronómico con pescadería, carnicería y productos gourmet con un denominador común:  Lo mejor de donde sea.

Gold Gourmet es un lugar donde cualquier aficionado con un mínimo de sensibilidad corre el riesgo de experimentar la versión gastronómica del síndrome de Stendhal(**),  no en vano Gold gourmet suministra sus joyas a los mejores chefs de la capital.



(**) El síndrome de Stendhal (también denominado Síndrome de Florencia) es una enfermedad psicosomática que causa un elevado ritmo cardíaco, vértigo, confusión e incluso alucinaciones cuando el individuo es expuesto a obras de arte, especialmente cuando éstas son particularmente bellas o están expuestas en gran número en un mismo lugar.
Más allá de su incidencia clínica como enfermedad psicosomática, el síndrome de Stendhal se ha convertido en un referente de la reacción romántica ante la acumulación de belleza y la exuberancia del goce artístico y, en este caso, también lo hacemos extensivo al goce culinario.